FE
De acuerdo a algunos historiadores, el origen del ser humano data de cientos de miles de años. Sin embargo, sólo tenemos conocimiento del hombre como ser social desde hace aproximadamente 9.000 años. Desde ese entonces tenemos narrativas de expresiones espirituales de estos habitantes. Podemos entender que las dimensiones del ser humano en relación a la tierra, para no hablar del universo, es mucho menor que la de una hormiga en una casa y su fragilidad es proporcional. Siendo así, ¿quién nos protege?. El hombre, dotado de una mente maravillosa, desarrolla como parte integral de su ser la fe. Conclusión : el hombre es un animal de fe, yo diría de buena fe.
En un comienzo se trataba de un conjunto de ritos y ceremonias para rendir culto al sol, a la luna, al viento, etc. Dependíamos cien por ciento de la naturaleza para subsistir. Lo más preocupante seguramente era garantizarse la alimentación. Cada comunidad contaba con sus propias costumbres y creencias que aliviaban el peso del día a día.
Pasaron los siglos y la población iba creciendo, las comunidades comenzaban a estructurarse y organizarse mejor, pero al mismo tiempo escaseaban los alimentos y la vida se hacía más difícil. Los conflictos entre las distintas poblaciones no cesaban, para lograr las tierras más fértiles y poder alimentar sus habitantes. Inclusive entre los pobladores de un mismo territorio la lucha era despiadada por lograr sobrevivir. Claro está, no solo eran razones económicas las causas de tanta desesperanza. La codicia, el deseo de poder, la lujuria, el miedo, también jugaban un papel importante en la descomposición social que se estaba viviendo.
En ese momento tan cruel de la historia, el ser humano de nuevo apela a su inteligencia y aparecen las religiones que conducen la fe de los humanos hacia la adoración de una divinidad, un Dios, quien nos señala la conducta moral y social indispensable para satisfacer nuestras carencias y evitar la destrucción del ser humano. Básicamente: llevar un vida austera, tener misericordia, respeto y amor al prójimo. En las religiones monoteístas, amar a Dios sobre todas las cosas. La falta de acatamiento de estas normas conllevaría a prolongar el sufrimiento en la tierra y después de muerto.
En la actualidad, el número de religiones existentes en el mundo es difícil determinar, pero algunos estiman unas 4.200 y otras tantas no activas. De ese total, quisiera destacar cinco por su importancia en nuestros días y que representan aproximadamente el 70% de la población del planeta. Ellas son: el cristianismo(33 %), el islamismo (19.6%), el hinduismo (13.4%), el budismo (5,9%) y el judaísmo (0,2%).
El cristianismo, fundado por Jesucristo, Jesús de Nazaret o simplemente Jesús, marca el comienzo de una nueva era en la historia de la humanidad. Su mensaje básico era el amor al prójimo, por encima de todo a los más oprimidos, y su cercanía con un único Dios creador del universo. A pesar de no tenerse conocimiento de haber dejado escrito alguno, su prédica, sus enseñanzas están recogidas en la Biblia, fuente de inspiración para edificar la iglesia católica y centenares de otras iglesias que rinden culto a Jesús como representante de Dios en la tierra.
El islamismo, fundado por Mahoma (n. La Meca, Arabia Saudita ) aproximadamente en el año 600 de nuestra era. Se ilumina del Corán, libro sagrado, que representa la palabra de Dios recibidas por Mahoma por intermedio del arcángel Gabriel. En él se encuentran un conjunto de preceptos religiosos y leyes para la conducta ciudadana. Creen en un solo Dios (Alá en árabe) y su mensaje es de paz, tolerancia e igualdad.
El hinduismo no tiene fundador. Se desarrolla en el norte de la India hace más de 3.000 años y se dice que es más una forma de vida que una religión. Está inspirado en sus libros sagrados que son las Cuatro Vedas. Al igual que las anteriores, le da mas importancia a la riqueza espiritual que a lo material. Creen en muchos dioses, en la reencarnación y la existencia de castas. La vida, tanto de los humanos como la de los animales, es sagrada.
El budismo fundado por Sidarta Gautama (563-483 AC), también en la India, quién renuncia a una vida de príncipe para dedicarse a la meditación en condiciones muy humildes. Después de muchos años, dice la leyenda, alcanzó un estado de conciencia suprema que hace de él el "iluminado", el Buda. En la historia es visto como un hombre común, no como el mensajero de un ser supremo. En la práctica es adorado como un Dios. Las enseñanzas del Buda son muchas. Entre ellas, las más difundidas se encuentran las "Cuatro Nobles Verdades": 1. La vida es sufrimiento. 2. Su causa es el deseo y la idea de permanencia. 3. El sufrimiento puede ser extinguido. 4.Para extinguirlo debemos seguir el Noble Octuple Sendero. Básicamente el desarrollo de la conducta ética, la disciplina mental y la sabiduría.
El judaísmo es la más antigua de las religiones y se remonta a los tiempos de Abraham, su fundador, venido a Canaan desde Mesopotamia, hace unos 4.000 años. La Torá, considerado el libro sagrado de los judíos, contempla la existencia de un solo Dios creador del universo y la llegada de un mesías, que vendrá a la tierra a salvar a la humanidad.
En la actualidad, el liderazgo de estos guías espirituales mencionados es descomunal. Cerca de 5.000 millones de personas los siguen. En vida, ninguno tuvo poder alguno con excepción de Mahoma quien lideró y ganó la batalla de Medina y posteriormente La Meca.
La importancia y la influencia de las religiones en el desarrollo de todas las civilizaciones conocidas es vital. El progreso espiritual, material, social, cultural, político, filosófico, científico, arquitectónico y artístico estaban vinculados a las creencias religiosas. Cuando las instituciones u organizaciones religiosas eran administradas con honestidad y fe, la evolución de las sociedades era notoria. Cuando se corrompían , y existen innumerables casos registrados en la historia, las mismas comenzaban a dar señales de decadencia e inclusive algunas desaparecían.
Las autoridades religiosas siempre estuvieron vinculadas al poder político y en muchas ocasiones estaban en manos de la misma persona, bien sea: Faraón, Rey, Emperador, Primer Ministro o Presidente. Su dominio abarcaba buena parte de Europa, Asia y Africa.
En el caso del mundo occidental, estas relaciones entre las autoridades espirituales y seculares, que en muchos casos habían sido conflictivas, comenzaron a distanciarse. A principios del siglo XVI, la iglesia católica era profundamente criticada por las corrientes humanistas en Europa que denunciaban las riquezas de la iglesia, los privilegios fiscales de las propiedades eclesiásticas, la forma de vida de muchos superiores religiosos y el abuso de la aplicación de las indulgencias. Además, hay que agregar la confrontación con la comunidad científica por la teoría del heliocentrismo de Galileo Galilei, que suponía cuestionar los textos bíblicos, como el hecho que la tierra fuera el centro del universo. En la actualidad, las distintas religiones mantienen una influencia importante sobre los gobiernos de occidente, pero en su gran mayoría son laicos o seculares, es decir independiente de cualquier organización o confesión religiosa.
A pesar que el balance de las religiones es, en mi criterio, muy positivo para la humanidad, no podemos dejar de mencionar la utilización de la fe con propósitos muy alejados y opuestos a la prédica y enseñanzas de sus fundadores. Tenemos el caso del islam que luego de conquistar la península arábiga se lanza a ocupar otros territorios al norte de Africa, la península española hasta Poitier en Francia. Luego siguieron hacia Asia, Bujará, Kabul y alcanzaron la frontera con la India. Todo en nombre de la fe y el principio de la guerra justa o Yihad. Así mismo, la Iglesia católica durante los siglos XI al XIV emprende las cruzadas para liberar los lugares santos y durante varios siglos utilizaron la Inquisición para juzgar a los herejes que en muchos casos terminaba con la pena de muerte. Ambas utilizaron prácticas muy crueles para alcanzar sus objetivos.
Ya hemos señalado que la fe es algo intrínseco al ser humano. La fe nos da la fuerza para lograr nuestros objetivos en la vida. La fe, de acuerdo a estudios científicos, acerca individuo a la felicidad. La fe nos hace entender que las maravillas naturales que nos rodean fueron creadas por un ser superior, que lo podemos llamar Dios o como queramos. La fe nos enseña que el amor a la vida, al prójimo, a los desposeídos, a los pecadores nos garantiza el camino hacia un mundo de paz y felicidad. Amar a Dios a través de la gente. Ya no tenemos miedo.
En parte, las religiones nos indican lo que hemos leído en el párrafo anterior. Por la otra, nos dicen:
El judío .- "nosotros somos el pueblo elegido"
El cristiano .-"si no tienes fe en Jesús, vas al infierno "
El musulmán.- "si no adoras a Mahoma, eres infiel"
El hinduista.-"nacimos diferentes, somos diferentes "
Quienes utilizan la fe, la ignorancia, el miedo y la debilidad del ser humano para conquistar seguidores con fines particulares deben ser denunciados. Existen muchas instituciones que se llaman religiones y sólo persiguen el lucro. Otras, como el ISIS, que buscan el poder y están causando un gran daño a la humanidad sólo con su búsqueda. Se critica la noción del Yihad islamita que, para algunos , da validez al uso de la violencia en contra de los infieles. La fe sin conciencia puede conducirnos al fanatismo, al extremismo y a la discriminación.
La religión puede ser parte importante de la identidad cultural y nacional y en algunos casos la causa fundamental de conflictos entre naciones o dentro un mismo territorio. Muchas veces alimentados por dirigentes políticos en busca de poder.
No pretendo comparar las instituciones religiosas formales con las señaladas en párrafos anteriores, pero si me gustarían que reflexionen sobre la forma que están predicando la fe. Han pasado 4.000 años y seguimos enseñando lo mismo y de la misma manera. Es cierto que el mundo que vivimos hoy es mucho mejor que el pasado y podríamos decir que el modelo utilizado ha funcionado. Pero: ¿Ha llegado la hora de un cambio?, ¿Podemos vivir mejor?.
La historia de la humanidad tiene etapas cuando grandes acontecimientos han cambiado su rumbo. Puede ser que estemos cerca de un cambio importante. Es posible que en el futuro se haga necesario buscar una forma diferente de propagar la fe. A las nuevas generaciones cada día pareciera costarle más entender la fe en la forma que la enseñan las iglesias tradicionales.
No comments:
Post a Comment