Thursday, April 28, 2016

CAPITALISMO Y POPULISMO


Presenciar la campaña electoral para las elecciones 2016 en EEUU  y no ser sorprendido al observar el grado de populismo de algunos candidatos de los partidos participantes, es prácticamente imposible.

Es común ver la presencia de candidatos populistas y representantes de organizaciones nuevas, en países de menor desarrollo, ofrecer lo que sectores importantes de la población quieren oír, sin contar  con estudios serios que  planteen la problemática existente y propongan soluciones sensatas. Lo importante no es tener la certeza de poder resolver los problemas planteados con políticas distintas a las que se han venido aplicando, lo importante es obtener los votos y una vez conquistado el poder, ya veremos.

En muchos casos nos encontramos que la imprevisibilidad económica y los planteamientos emocionales sobre los racionales llevan a resultados no esperados e indeseables. Por tratarse de que esto está sucediendo en la primera potencia militar y económica del mundo las propuestas de algunos candidatos, tanto republicanos como demócratas, han comenzado a inquietar a representantes de otras economías que sienten que podrían ser afectadas con la llegada de alguno de ellos al poder.

Plantear un ataque indiscriminado a Wall Street, primera fuente para canalizar los ahorros de los estadounidenses y de muchos otros países en inversiones industriales y comerciales; prometer la denuncia de los acuerdos económicos internacionales; deportar a once millones de trabajadores inmigrantes; son algunas de las propuestas populistas y anticapitalistas que de materializarse tendrían consecuencias nefastas para la economía de los EEUU y por ende en muchos otros países.

Solamente, estos tres temas son de vital importancia para la economía de los EEUU y han sido pilares fundamentales para mantenerla como primera potencia mundial. Colocar obstáculos a la inversión, disminuir la fuerza de trabajo y crear barreras al comercio internacional son medidas que afectan directamente el desarrollo económico y social. Es por eso,que los gobiernos serios y responsables mantienen vigilados permanentemente los indicadores de crecimiento de estas variables. Anunciar medidas indiscriminadas que puedan afectarlos para ganarse el voto de una parte del electorado, que ingenuamente piensa que va ser beneficiado, es populismo de izquierda o de derecha y no son propuestas prudentes y sensatas. Es posible que estos planteamientos sean aceptables en boca de un ciudadano común o de un candidato del tercer mundo, pero que sean la propuesta de un aspirante a la Casa Blanca es inaceptable.


Para finalizar, quisiera ser optimista y pensar que ninguno de estos candidatos tiene opción de ganar y que un poco de populismo es bueno para mantenernos vigilantes y siempre buscar que las desigualdades sociales sean cada día menores. Por otro lado, confío que de llegar uno de estos personajes, las instituciones existentes no permitirían la toma de decisiones en materia de políticas publicas que no estén en el marco de la sensatez y la prudencia.

Wednesday, April 13, 2016

EL CAPITALISMO Y EL ESTADO ISLAMICO

EL CAPITALISMO Y EL ESTADO ISLAMICO


En la actualidad una de de las principales preocupaciones de las grandes potencias capitalistas es la declaración de guerra del Estado Islámico (EI) en su contra. Cuando uno busca las razones en el discurso del EI, no puede pensar que se crean realmente capaces de conquistar todo el planeta o que simplemente estén luchando contra el imperialismo, como tradicionalmente lo conocemos. Su motivo, en mi entender, es otro: El capitalismo.

El imperialismo se le conoce desde  la antigüedad y pasó por muchas etapas con el predominio de grandes imperios. La historia de la humanidad ha sido una constante guerra por la conquista de grandes territorios y dominios de otros pueblos. En el mundo moderno,tal vez, el mas connotado fue el de la Gran Bretaña. Si bien es cierto que dejo huellas muy negativas y que aún estamos pagando las consecuencias, también es verdad que los territorios conquistados no vivían en plena armonía y por el contrario existía grandes penurias y conflictos políticos y sociales importantes. El balance habría que analizarlo caso por caso y no es el objetivo de este articulo. 

Como resultado de esa política imperialista surgieron un gran numero de colonias dependientes de los países más desarrollados que en su gran mayoría han sido descolonizadas. A partir del fin de la segunda guerra mundial y la creación de las Naciones Unidas, parece haber desaparecido en el espíritu de las grandes potencias la ambición de conquistar nuevos territorios. Con muy pocas excepciones, como es el caso de Rusia y su relación con los países que conformaban la Unión de Repúblicas  Socialistas Soviéticas.En este sentido, no creo que pueda existir el temor del EI de una pretensión de expandirse territorialmente por parte de las grandes potencias capitalistas. Tampoco puede existir el recelo de una penetración religiosa, puesto que en todos estos países existen gobiernos laicos y la plena libertad de cultos para sus ciudadanos.

El temor del Estado Islámico, al igual que todo gobernante autoritario, no es al imperialismo de occidente, ni tampoco alguna corriente religiosa, su miedo es al capitalismo. Al contrario de lo predicho por Lenin: “ El imperialismo última etapa del capitalismo”, éste se ha fortalecido de tal manera que no existe poder en el mundo capaz de detenerlo. La historia del ser humano siempre ha sido una lucha contra las adversidades naturales y otra por descifrar los misterios de la vida. La gente ha encontrado en el capitalismo la manera de alcanzar la libertad, de innovar, de expresarse, de enriquecerse, en fin de escoger su propio destino, todo la cual ha contribuido ha mejorar las condiciones de vida de miles de millones de personas. Claro está, un régimen autoritario, que se dice representar los poderes divinos, encuentra en el capitalismo una amenaza permanente a su existencia, que con la ayuda de los medios de comunicación actuales se les hace imposible detener.

Los fundadores del Estado Islámico han sentido la amenaza del capitalismo y a diferencia de otros líderes y comunidades han decidido combatirlo de manera radical. Han demostrado ser un peligro para el mundo capitalista y éste ha reaccionado lentamente, en parte por que ningún gobernante tiene el control y en consecuencia no hay manera de negociar. Lamentablemente la salida también tendrá que ser radical.